Así Paul
Harris en el mensaje ante la Convención del RI DE 1936 en Atlantic
City, Nueva Jersey, USA “Los
sudamericanos consideran a los negocios un medio para lograr un fin pero no un
fin en sí mismo “.
Paul Harris en el mensaje ante los Rotarios de Winnipeg. Manitoba, Canadá, durante la
Cuarta Conferencia para la buena voluntad dijo textualmente “La felicidad es uno de los atributos del
hombre que se resiste a la búsqueda más decidida y cuando llega, lo hace sin
que la busquemos, en los sitios más insospechados”.
Por eso la satisfacción personal dependerá muy mucho con lo que hacemos
todos los días y una de ellas queramos o no es nuestro trabajo profesional. El
saberlo aprovechar esto nos va a condicionar a tener más tiempo para otras
cosas que será también muy importante para obtener una gran satisfacción
personal.
Benjamín
Franklin dijo una frase para mí genial “Las tres
cosas más difíciles de este mundo son: guardar un secreto, perdonar un agravio
y aprovechar el tiempo”.
Es muy común escuchar a las personas que no tienen tiempo para realizar
ciertas labores, como también preguntas ¿Qué hacer para organizar el
tiempo? ¿Cómo utilizarlo eficientemente?
Nosotros y pensamos como Rotarios, vamos a exponer
“las 15
pinceladas mágicas que pueden mejorar tu vida y ser feliz”
1) Lo primero es ganar tiempo para ti. Reserva en
tu agenda una hora para ti y dale a esa cita contigo misma la importancia que
tiene, como si se tratase de una importante reunión de trabajo, y no la
canceles bajo ningún pretexto. Si alguien te pide algo en ese tiempo, no cedas,
recuerda que tienes una cita con alguien muy importante: tú.
2) No hagas algo que no quieras hacer. A veces
aceptamos proyectos que no nos interesan o nos apetecen sólo por complacer a
alguien. Así que antes de volver a aceptar cualquier propuesta, piensa bien si
te interesa y el tiempo que tendrás que dedicarte a ello.
3) Calidad en lugar de cantidad: Estamos
acostumbrados a recibir mil y un estímulo del exterior, y realizar varios
trabajos al mismo tiempo. Sin embargo, hay muy pocas cosas que nos dejen huella
y en las que pongamos los cinco sentidos. ¡Tienes que saber elegir el mejor
trabajo para ti, y descartar aquellos que no lo son!
4) Tiempo para vivir. ¿Vives
para trabajar o trabajas para vivir? Si dedicas la mayor parte de tu tiempo al
trabajo, por muchos éxitos que consigas, seguramente estás dejando de lado
aspectos tan importantes como tu familia y tus amigos.
5) Vive y prescinde de
las modas. No debemos dejarnos seducir por las
modas y medir nuestra felicidad por lo que tenemos. Muchas veces caemos en el
círculo de trabajar para tener más y más, pero en realidad lo único que
conseguimos así es gastar nuestro tiempo en algo que no nos llena. Pregúntate
si te compensa esa actitud y recuerda que necesitas tiempo para pasear, jugar
con tus hijos o leer un libro que además son actividades que no cuestan dinero,
por lo que no necesitas tener tanto.
6) Lo que necesitas y
lo que no. Las cosas que no necesitamos, nos
llenan durante muy poco tiempo para luego caer en el olvido. Quizás el tiempo
que empleaste en conseguirlas las podrías haber dedicado a otros objetivos más
duraderos. Recuerda que prescindir de determinadas cosas puede ayudarte a ganar
más tiempo para ti.
7) La monotonía es un
enemigo, ya que genera insatisfacción y aburrimiento. Busca
cosas diferentes que hacer cada día y tendrás la sensación de aprovechar el
tiempo y tener mayor satisfacción.
8) Márcate objetivos. Esta es la base, o la forma de poder
desarrollar cualquier estrategia. Si no sabes a dónde ir, o que logro se
intenta obtener, muy difícilmente logres algún resultado importante. Se
claro, define correctamente y escríbelo. Luego lo tienes que leer,
critícalo, y lo vas modificando. Retroalimenta estos pasos hasta lograr
el mejor resultado, en el menor tiempo posible.
9) Fracciona
los objetivos complejos. Siempre es posible fraccionar los objetivos a largo
plazo, en los de mediano plazo y luego en los corto plazo o mensuales.
Incluso los mensuales se pueden acotar a una sucesión de objetivos semanales y
éstos separarlos en objetivos de dos o tres días, o incluso diarios. El secreto
es tenerlos alineados, para recorrer un camino armonioso hacia el largo plazo,
y no desviarse.
10) Anota
tus objetivos en tu agenda. Hay que escribir todos los objetivos en las agendas
y mantener el compromiso de cumplir con todos ellos.
11) Prioridades. Escribe tus prioridades, como por ejemplo
vencimientos de pago o de entrega de trabajos o cumplimiento de rutinas internas.
Muchas veces podrán quedarnos tareas pendientes, pues no somos máquinas
perfectas y cumplidoras, y esas tareas atrasadas pueden retrasar o tapar las
prioridades reales del día. Tenemos que diferenciar entre Lo importante que
tiene prioridad y lo urgente que no debe cambiarnos los objetivos de nuestra
agenda. El mezclar estos dos conceptos de ergonomía de trabajo es un
error muy común.
12) Mayor productividad. Todos tenemos un horario en
que nos concentramos mejor, en que nos dejan "trabajar
tranquilos", o un horario en que hay que hacer el trabajo sí o sí.
Por el ejemplo el cierre del día, o de una caja, o redactar cartas o informes. Sepamos
claramente en qué momento del día podemos o debemos realizar tal o cual tarea,
y en ese momento nos abocaremos a ello, y no a otra que se pueda realizar luego
o antes.
13) Controla
tus tiempos. Por
el sistema que mejor se adapte a tu personalidad, controla todos los días tus
tiempos reales de trabajo, para saber si podrás cumplir con tus objetivos del
día, si estás adelantado o atrasado. Muchas veces es posible realizar
ajustes o motivarse más, para mantenerse en línea. Los
"recreos" muchas veces relacionados con el chat, las redes sociales o
el mail, solo empeoran tu agenda de trabajo. Si los objetivos impuestos son
diarios, el paso a paso es esencial para lograr la eficiencia y mantenerla.
14) Saber delegar. Todos
tenemos habilidades, y podemos realizar muchas tareas distintas, algunas mejor
que otras. Esto muchas veces nos lleva a creer que podemos hacer todo, y nos
cargamos de trabajo, pensando que podemos hacerlo, que lo hacemos mejor, o que
no hay nadie que lo sepa hacer. Las habilidades y el conocimiento nos dan
posibilidades, pero el tiempo real para trabajar es quien nos impone el
freno. En función del tiempo que tenemos para trabajar hay que organizar
las tareas pero sabiendo distinguir una de otras. El secreto es delegar la tarea delegable.
15) Organiza equipos de trabajo. No es fácil armar un equipo de trabajo. Hay que saber elegir
a su líder. Además éste debe mantener motivados a todos sus integrantes,
debe saber delegar y proporcionar soluciones viables para obtener lo mejor de
cada uno. La confianza y la contención son factores esenciales.
Como decía Paul Harris “los negocios deben ser un medio para lograr un
fin pero no un fin en sí mismo “.